19/06/16 – DIA 6: BERDUCEDO-GRANDAS DE SALIME, 22,43 km, 7h00’ (A873-D1215) – BAJO LAS NUBES

Antes de las 6:30 ya estamos caminando. Miguel Ángel ha decidido seguir por carretera (20 km) y nosotros lo haremos por el Camino. Tras un par de kms por senderos, salimos a una carretera local; es domingo y temprano y no hay tráfico. Así llegamos a La Mesa y comienza un fuerte repecho donde, a medio camino un ternero implora una ayuda que no podemos darle para volver con mamá vaca. Jean Louis nos adelanta. Llegamos, por fin, a coronar el Collado de Los Coriscos a partir de donde comienza un prolongado descenso, primero por asfalto, y desde Buspol por un serpenteante sendero.
Desde el collado la vista es espectacular, con todo el valle del Navia inmerso bajo una espesa capa de albas nubes.
En Buspol nos alcanzan los "tres mosqueteros", que ya habíamos divisado tras nosotros cuando alcanzábamos La Mesa.
Bajan mucho más rápidos y se pierden en la niebla, aunque seguimos oyendo sus voces durante un buen rato. Bajamos y bajamos hasta situarnos bajo el nivel de las nubes que, curiosamente aún no nos envuelven y constituyen como un muro ante nosotros.
El descenso hacia el embalse es largo y pronunciado, pues hemos de salvar un desnivel de más de 800 m en poco más de 5 km. Al parecer hay una variante que acorta considerablemente el recorrido tomando una barca que evita el enorme rodeo que obliga el citado embalse, que de otro modo es necesario cruzar por la presa, que además el sendero sobrepasa, y hay que retroceder casi un km.
Nosotros seguimos el Camino, cruzando la presa, donde nos reunimos con Miguel Ángel que ha llegado antes y está esperando nuestra arribada, haciendo un alto poco después. Sin embargo, divisamos un bar (Hotel Las Grandas) y decidimos seguir hasta él. El Cronista se queda obrando merced a un apretón sobrevenido que no admite dilación. Con ese don especial que tiene, al recoger sus palos, uno de ellos vino a caer en la excreta lo que obligóle a un concienzudo fregoteo en los lavabos del figón.
En la terraza del hostal, tras unas cervezas y otras viandas, dispúsose el somatén, ahora al completo, a ganar Grandas, para lo que había que SUBIR de nuevo, por la carretera. Un hospitalero emprendedor y sagaz reparte a cada peregrino un panfleto desde su coche ofreciendo sus servicios, así que, con renovados bríos atacan la cuesta hacia Grandas. El Cronista, vaya Vd. a saber por qué, como si tuviera un cohete en sus asentaderas, se adelanta a sus compañeros. Llegado al punto en el que hay que abandonar el asfalto para atacar una senda más ascendente aún, los hermanos Alonso se inclinan por el asfalto. Félix, ortodoxo donde los haya, seguiría la misma ruta que el Cronista. Finalmente llegamos a Grandas y nos sentamos junto a la verja del parque en espera de Félix, que finalmente se reúne con nosotros y nos vamos al albergue, al que también llegarán Jean Louis, Nacho y Daniel, un simpático palmero.
A nosotros nos toca una habitación exclusiva donde estamos los cuatro, y además nos lavan la ropa.
Sólo hay una ducha, pero como somos los primeros en llegar no tenemos problemas para la compostura.
Tras la siesta, nos vamos al bar Occidente, donde se nos ha informado que dan un pulpo exquisito. Pero antes pasamos por otro: Bar Centro donde tras unas cañas charlamos con Nacho, que resulta conocer a Cristóbal, con quien Félix compartió el camino Francés hace tres años. Se añade un japonés que toma notas frenéticamente en su idioma. Al igual que la coreana Pa, apenas habla inglés, pero nos explica que ya ha hecho todos los Caminos y la Ruta de la Plata por añadidura. Le invitamos a cerveza, pero no lo entiende.
Por su parte Nacho nos cuenta retazos de su intensa y accidentada trayectoria vital, que es asombrosa. El pulpo de Occidente, servido por una joven camarera italiana, que se ha venido a trabajar a España y sueña con ir a Andorra, es exquisito.
Volvemos a nuestro Albergue Casa Sánchez y cómodamente nos entregamos al reparador sueño.

CHF Siempre Ricos

Logo Edutours
Puedes ayudar a que los comentarios sean más incisivos de lo que jamas han sido.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *